¿Se han dado cuenta cuánta música hay acumulada en las plataformas digitales? Mucha más de la que podemos y queremos escuchar.

La facilidad de las plataformas de streaming generó una especie de sobreproducción como nunca antes, dejando de lado la calidad debido a la enorme cantidad de productos.

Vvarios grandes de la industria, como Deezer y Altafonte, tomaran la decisión de terminar contratos de distribución con muchos artistas que ya no les están generando ganancias. 

En unos cuantos meses varios creadores de música quedaron a la deriva y tuvieron que buscar otras plataformas para mover sus productos.

Miguel Martorell, director gerente de Altafonte, dijo que esto es parte de una estrategia empresarial para centrarse en artistas consagrados o con potencial de crecimiento. 

Deezer afirmó que ya no pagará por contenido de baja calidad, distribuyendo mejor el ingreso para los artistas que sí sean rentables o tengan más de mil oyentes al mes.  

Según un estudio de Luminate, en 2023 se incorporaron más de 120 mil pistas de audio a plataformas como Spotify, es decir, 3.6 millones de canciones nuevas.

Esto ya saturó las plataformas de streaming, mientras los consumidores empiezan a tener dificultades para escuchar y encontrar buena música.  

¿Cuál es el estado de la industria musical frente a los despidos?

Ainara LeGardon, experta en propiedad intelectual, dice que se está vinculando la calidad artística con los números y que las plataformas están trabajando en sus ganancias.

Lo anterior resulta de que el acceso a la música esté en manos de multinacionales sin rostro.

Y es que la calidad de la música que llega a las plataformas no depende de alguien específico, sino de empresas enormes que no observan el contenido, solamente los números. 

Al mismo tiempo surgen alternativas para los artistas que no tan conocidos o comerciales, y que les permiten subir su música a internet a precios justos.

Es un enorme desafío encontrar un equilibrio entre calidad y cantidad, en un mundo donde todo se masifica y se produce por millones, aunque carezca de calidad. 

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